El cierre percutáneo de la orejuela auricular izquierda (LAAC, por sus siglas en inglés) se ha consolidado como una estrategia eficaz para la prevención del accidente cerebrovascular (ACV) en pacientes con fibrilación auricular no valvular (FANV) que presentan contraindicación o intolerancia a la anticoagulación a largo plazo. Sin embargo, el tratamiento antitrombótico óptimo durante el período inicial posterior al implante —clave para prevenir la trombosis relacionada con el dispositivo (TRD)— aún no está claramente definido.
El ensayo ANDES (Anticoagulation versus Dual Antiplatelet Therapy After Left Atrial Appendage Closure) fue diseñado para comparar la eficacia y seguridad de dos estrategias antitrombóticas a corto plazo —anticoagulantes orales directos (ACOD) frente a doble antiagregación plaquetaria (DAP)— durante los primeros 60 días posteriores al procedimiento de LAAC.
Se trata de un ensayo clínico aleatorizado, prospectivo, multicéntrico e internacional que incluyó 510 pacientes con FANV reclutados entre octubre de 2018 y mayo de 2025. Los participantes fueron asignados aleatoriamente en proporción 1:1 a recibir anticoagulación con un ACOD o DAP (aspirina + clopidogrel) durante 60 días tras el cierre percutáneo de la orejuela.
A los 60 días, todos los pacientes fueron sometidos a una ecocardiografía transesofágica (ETE), cuyas imágenes fueron evaluadas por un laboratorio central independiente y ciego al tratamiento asignado.
El criterio de valoración primario fue la presencia de TRD detectada por ETE a los 60 días en los pacientes que continuaban recibiendo el tratamiento asignado (análisis por protocolo).
El criterio de seguridad incluyó mortalidad por cualquier causa, ACV, sangrado o TRD clínicamente relevante que condujera a un cambio terapéutico dentro de los 60 días posteriores al procedimiento (análisis por intención de tratar).
De los 510 pacientes incluidos, con una edad media de 77 ± 9 años y 35% mujeres, 253 fueron asignados al grupo ACOD y 257 al grupo DAP. En total, 399 pacientes se sometieron a ETE a los 60 días mientras continuaban con el tratamiento asignado.
La TRD se observó en 3 pacientes (1,5%) del grupo ACOD y en 8 pacientes (4,1%) del grupo DAP (diferencia: -2,7%; IC95%: -6,0% a 0,6%; p = 0,110).
El criterio de seguridad compuesto ocurrió en 52 pacientes (22,5%) del grupo ACOD frente a 82 pacientes (34,9%)del grupo DAP (diferencia: -12,4%; IC95%: -20,6% a -4,2%; p = 0,003).
Esta diferencia se explicó principalmente por una menor tasa de eventos hemorrágicos en el grupo tratado con ACOD (17,4% vs 24,9%; diferencia: -7,5%; IC95%: -14,6% a -0,4%; p = 0,038).
¿Qué nos deja este estudio?
En pacientes con fibrilación auricular no valvular sometidos a cierre percutáneo de la orejuela izquierda, el uso de anticoagulantes orales directos durante los primeros 60 días no redujo significativamente la incidencia de trombosis del dispositivo en comparación con la doble antiagregación plaquetaria.
No obstante, la estrategia con ACOD se asoció con un perfil de seguridad más favorable, principalmente por una menor incidencia de sangrados.
Los autores señalan que los resultados deben interpretarse con cautela debido al tamaño del estudio y a la menor diferencia entre grupos de la esperada, por lo que será necesario confirmar estos hallazgos en ensayos de mayor escala.
