Si bien existen informes sobre la implementación de campañas de vacunación contra COVID-19 en poblaciones del mundo real, éstos provienen de países de altos ingresos o de la experiencia con vacunas con tecnología de ARN mensajero. Existen pocos datos sobre los resultados de la vacunación en países de ingresos bajos o medios.
Se publicaron en JAMA Network los resultados de un estudio de cohorte realizado por Alejandro Macchia y cols. con el objetivo de evaluar si la aplicación pragmática de 3 vacunas contra COVID-19 disponibles en Argentina, se asocian con una reducción de la morbilidad, mortalidad por todas las causas y mortalidad por COVID-19.
La población del estudio fueron 663602 participantes de al menos 60 años de edad, residentes en la Ciudad de Buenos Aires, Argentina.
Las vacunas utilizadas fueron rAd26-rAd5 (Sputnik V, Gamaleya Institute, Russia), ChAdOx1 ( Astra-Zeneca/Oxord, UK) y BBIBP-CorV (Sinopharm, Beijing Institue of Biological Products, China). Al momento de este reporte la Argentina enfrentaba una escasez de vacunas suficientes para vacunar a toda su población, por lo que las autoridades sanitarias nacionales decidieron posponer la aplicación de las segundas dosis para cubrir al mayor número de personas posible con al menos una dosis.
El 81.4% fueron vacunados con al menos una dosis en el periodo comprendido entre el 29 de diciembre de 2020 al 15 de mayo de 2021. La edad media de toda la población fue de 74.4±8.7 años, con un 61.8% de mujeres.
El 68% recibieron rAd26-rAd5, 29,5% ChAdOx1 y 2.4% BBIBP-CorV
La densidad de incidencia de casos de COVID-19 confirmada fue de 36.25 casos/100.000 personas-día entre los que no recibieron la vacuna, 19.13 casos/100.000 personas-día entre los que recibieron 1 dosis y 4.33 casos/100.000 personas-día entre los que recibieron 2 dosis.
Esto se asoció con una reducción del 88.1% en la tasa de infección en aquellos que recibieron las 2 dosis, y del 47.2% para aquellos que recibieron 1 dosis.
Para el grupo de participantes entre 70-79 años, y más de 80 años, el esquema completo se asoció con una reducción del 94% y 88.4% en la tasa de infección respectivamente.
La mortalidad por todas las causas fue de 11.74 casos/100.000 personas-día entre los no vacunados, 4.01 casos/100.000 personas-día entre los que recibieron 1 dosis y 0.40 casos/100.000 personas-día en los que recibieron 2 dosis.
La administración de una única dosis se asoció con una reducción del 65.8% en la mortalidad por todas las causas, y del 96.6% con un esquema de 2 dosis.
Esta reducción fue del 94.2% en aquellos mayores de 80 años y del 98.2% en aquellos participantes que tenían entre 70-79 años.
Del mismo modo, la tasa de mortalidad relacionada con el COVID-19 fue de 2.31 casos/100.000 personas-día, en los no vacunados, 0.59 casos/100.000 personas-día en aquellos que recibieron 1 dosis y 0.04 casos/100.000 personas-día entre los que recibieron esquema completo.
La reducción de la mortalidad relacionada con COVID-19 fue del 98.3% en los que recibieron 2 dosis y del 74.5% en aquellos que recibieron 1 dosis.
Comparado con las personas que recibieron 2 dosis de rAd26-rAd5, los que recibieron 2 dosis de ChAsOx1 tuvieron un riesgo similar de infección documentada por COVID-19 durante el seguimiento (H 1.05 IC 95%: 0.80-1.37, p=0.74) y de muerte por cualquier causa (HR 0.69, IC 95%: 0.33-1.45; p=0.33).
Aquellos que recibieron el esquema completo de BBIBP-CorV tuvieron un riesgo significativamente mayor en términos de infección documentada por COVID-19 (HR 1.65; IC 95%: 1.40.1.93; p<0.001) pero sin diferencias significativas en la mortalidad por cualquier causa (HR 2.05; IC 95%: 0.79-5.30; p=0.14).
¿Qué podemos recordar?
Dentro de los 5 primeros meses luego del inicio de la campaña de vacunación, la vacunación se asoció con una reducción significativa de la infección por COVID-19, así como de la mortalidad por todas las causas y relacionada a COVID-19.