La Dra. Marie-Sophie L.Y. de Koning presentó durante la última jornada del Congreso ACC22 los resultados del estudio GIPS-IV, estudio en fase 2, aleatorizado, doble ciego y multicéntrico que buscó investigar si el tiosulfato de sodio, fuerte antioxidante, administrado al momento de la reperfusión reduce el tamaño del infarto en pacientes con un primer infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST (IAMCEST).
Los pacientes con IAMCEST dentro de las 12 h del inicio de los síntomas fueron aleatorizados a recibir 12.5 gr iv de tiosulfato de sodio vs placebo iv al momento de la cinecoronariografia/angioplastia coronaria. Luego de 6 h del procedimiento una segunda dosis. A los 4 meses de seguimiento se les realizaba una resonancia magnética cardíaca (RMC) y luego eran seguidos a 2 años.
El punto final primario fue el tamaño del infarto medido por RMC a 4 meses.
Se aleatorizaron 380 pacientes a recibir tiosulfato de sodio (n=184) o placebo (n=187).
La edad media fue 62 años, con un 23% de mujeres.Las caracterizas estaban bien balanceadas entre ambos grupos
A 4 meses no se observó una diferencia significativa en el tamaño del infarto medido por RMC entre los pacientes que recibieron tiosulfato de sodio vs placebo (8% vs 8.9%, p=0.55).
Los eventos cardiovasculares adversos mayores fueron similares en ambos grupos, pero el grupo de pacientes que recibió tiosulfato de sodio presentó más frecuentemente vómitos.
¿Qué podemos recordar?
La administración de tiosulfato de sodio al momento de la reperfusion miocardica de pacientes con infarto con supraST resultó segura, pero no redujo el tamaño del infarto.