La respuesta inflamatoria sistémica a la infección por el coronavirus del sindrome respiratorio agudo severo-2 (SARS-CoV-2) es un rasgo distintivo de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) y la mayoría de los pacientes hospitalizados presentan biomarcadores inflamatorios anormales. Los niveles séricos elevados de proteína C reactiva (PCR), un marcador de inflamación sistémico, se asocian con enfermedad severa en las infecciones bacterianas y virales.
El objetivo del presente estudio realizado por Smilowitz y col. fue evaluar la asociación entre el nivel de PCR al momento de la presentación inicial y los eventos clínicos en pacientes con COVID-19 hospitalizados.
Para ello, se identificaron los adultos consecutivos mayores de 18 años con COVID-19 admitidos al sistema de salud NYU Langone Health en New York entre el 1 de marzo y el 8 de abril de 2020. Los pacientes con mediciones de PCR fueron incluidos. En todos ellos se determinó la ocurrencia de tromboembolismo venoso (TEV), injuria renal aguda (IRA), enfermedad crítica, y mortalidad intrahospitalaria.
Entre los 2782 pacientes hospitalizados con COVID-19, 93.5% tenían mediciones de PCR. La mediana de PCR inicial fue 108 mg/l (RIC 53-169) con solo el 2.2% de los pacientes con PCR inicial normal < 5 mg/ml. Las concentraciones elevadas de PCR al inicio se asociaron con mayor temperatura y menor saturación de oxígeno, recuentos elevados de glóbulos blancos y plaquetas, niveles iniciales altos de dímero-D y concentraciones iniciales elevadas de ferritina.
Las concentraciones iniciales de PCR por arriba de la mediana se asociaron con mayor riesgo de TEV (8.3% vs 3.4% , OR aj 2.33; IC 95%: 1.61-3.36) IRA (43% vs 28.4%, OR aj 2.11; IC 95%: 1.76-2.52), enfermedad crítica (47.6% vs 25.9%, OR aj 2.83; IC 95%; 2,37-3.37) y mortalidad intrahospitalaria (32.2% vs 17.8%, OR aj 2.59; IC 95%: 2.11-3.18) comparado con los pacientes con PCR por debajo de la mediana.
Los pacientes con los cuartiles más altos de PCR medidos presentaban la mayor probabilidad de presentar estos eventos. Esta asociación entre la concentración de PCR y los resultados adversos fueron consistentes en los subgrupos definidos por edad, sexo, raza y obesidad.
En un análisis de subgrupos por nivel de dímero D, los pacientes con valores bajos tanto de PCR y de dímero D presentaban un bajo riesgo de presentar eventos adversos durante la internación. Sin embargo, la incidencia de TEV (12.3% vs 2.8%, p<0.001), IRA (52.1% vs 23.7%, p<0.001), enfermedad crítica (58.2% vs 20.2%, p<0.001) y mortalidad (39.8% vs 13%, p<0.001) fueron significativamente mayores en pacientes con elevaciones concomitantes de PCR y dímero-D comparado con aquellos con PCR y dímero-D bajos.
¿Qué podemos recordar?
En este anáisis de pacientes hospitalizados por COVID-19 en un sistema de salud de Nueva York, casi todos los pacientes presentaban indicios de una respuesta inflamatoria sistémica a la infección por el SARS-CoV-2, con una concentración media de PCR de 108 mg/dl, un valor casi 40 veces superior al limite superior normal.
Los pacientes con niveles elevados de PCR por encima de la mediana al momento del ingreso, presentaron mayor probabilidad de desarrollar eventos adversos intrahospitalarios tales como tromboembolismo venoso, IRA, enfermedad critica, y mortalidad.