En las últimas décadas, el tratamiento de la estenosis valvular aórtica (EAo) severa mediante el reemplazo valvular aórtico percutáneo (TAVI) ha incrementado su espectro de pacientes candidatos a diferentes estratos de riesgo quirúrgico y rangos etarios, demostrando una mejora considerable en términos de sobrevida y calidad de vida autopercibida.
A pesar de las nuevas tecnologías de prótesis valvulares y mayor experiencia de los operadores alrededor del mundo, la incidencia de accidente cerebrovascular (ACV) asociado al procedimiento se encuentra alrededor del 4%. Así, se han desarrollado nuevos dispositivos de protección cerebral que han demostrado una reducción de las lesiones cerebrales evidenciadas por resonancia magnética, mientras que aún son necesarios futuros estudios a fin de determinar la costo-efectividad de esta estrategia, como también el impacto de los ACV peri procedimiento en el seguimiento.
El objetivo del presente estudio realizado por Zaid Almarzooq y colaboradores del Beth Israel Deaconess Medical Center (Boston, USA) fue determinar el impacto del ACV relacionado al TAVI en la evolución clínica en el seguimiento.
Se realizó con este propósito una búsqueda de pacientes con EAo severa sometidos a un TAVI pertenecientes a un registro médico de salud de los Estados Unidos, durante el periodo comprendido entre enero de 2012 a diciembre de 2017. Se identificó al subgrupo de pacientes con antecedentes de un ACV peri procedimiento, contrastando a este subgrupo con el total de la cohorte en términos de la ocurrencia del compuesto clínico combinado de mortalidad por todas las causas, infarto agudo de miocardio (IAM) y recurrencia de ACV a un año de seguimiento.
Se incluyó para el análisis a un total de 129628 pacientes. La edad promedio de la poblacion muestral fue de 82.6±6.9 años, con un 47.3% de sexo femenino y un 6.2% de antecedentes de ACV. Del total de la cohorte analizada, el 4.3% presentó un ACV periprocedimiento.
La ocurrencia de un accidente cerebrovascular asociado a un reemplazo valvular aórtico percutáneo es un evento clínico frecuente, asociado con una peor evolución clínica en el seguimiento y mayores gastos por parte del sistema de salud.
Este subgrupo de pacientes fue mayormente de sexo femenino, con un mayor antecedente de enfermedad coronaria ateroesclerotica y ACV previo, mayor enfermedad vascular periferica, fibrilacion auricular y obesidad, y mayor enfermedad respiratoria cronica, en relacion al subgrupo de pacientes sin ACV periprocedimiento. A su vez, los pacientes con ACV periprocedimiento fueron sometidos mayormente a un TAVI de urgencia y dados de alta a un centro de cuidados de tercer nivel, en relación a los pacientes sin ECV.
Luego del ajuste por potenciales variables confundidoras, la ocurrencia de un ACV peri procedimiento se asoció a una mayor ocurrencia del objetivo clínico combinado a un año de seguimiento (HR 1.67 [IC 95% 1.56-1.78]), acarreado principalmente por una mayor recurrencia de ACV en el seguimiento (HR 1.99 [IC 95% 1.69-2.34]).
Esto conllevo al requerimiento de un gasto económico estadísticamente superior por parte del sistema de salud (diferencia U$S 9245; p<0.001), y a una menor cantidad de días en domicilio luego del egreso sanatorial durante el primer año de seguimiento (diferencia 16 días; p<0.001), en relación al subgrupo de pacientes sin ECV periprocedimiento.
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Médico Cardiólogo UBA-SAC - Residente de Hemodinamia y Cardiología Intervencionista en Hospital Italiano de Buenos Aires - Editor MedEcs.