La angioplastía coronaria (ATC) con stents liberadores de fármacos (SLF) se realiza ampliamente como tratamiento estándar de la cardiopatía isquémica. Cada año, se realizan más de 600.000 procedimientos en Estados Unidos y en la Unión Europea. Una vez implantado un SLF, la terapia antiplaquetaria —con aspirina o inhibidores de P2Y12— es crucial para prevenir eventos isquémicos, como la trombosis del stent, que pueden resultar letales. Sin embargo, el impacto específico de la no adherencia a cualquier tipo de terapia antiplaquetaria a lo largo del tiempo no ha sido completamente cuantificado.
Un nuevo estudio de cohorte, publicado en JACC, evaluó el efecto de la no adherencia a la terapia antiplaquetaria sobre eventos críticos tras la ATC. Utilizando registros nacionales de seguros de salud y controles médicos de Japón, los investigadores analizaron los datos de 40.902 pacientes en edad laboral que recibieron un SLF entre abril de 2016 y marzo de 2022. El sistema japonés, que solo permite el acceso a fármacos antiplaquetarios mediante prescripción y los cubre a través del sistema nacional de salud, ofreció una oportunidad única para seguir de forma precisa la adherencia tanto a aspirina en baja dosis como a inhibidores de P2Y12.
Se definió no adherencia como una cobertura de prescripción de antiplaquetarios menor al 50% en los 90 días previos a cada punto de análisis. A partir del día 90 post-ATC, se evaluaron los riesgos cada 5 días hasta los 3 años (1.095 días), aplicando un riguroso análisis por puntos temporales con emparejamiento por puntaje de propensión.
La cohorte tuvo una edad media de 58,3 ± 8,3 años, con solo un 5,5% de mujeres. El seguimiento mediano fue de 653 días (RIC: 235-1.233).
El tratamiento previo a la ATC incluía medicamentos para hipertensión en 42,9%, dislipidemia en 26,3% y diabetes en 22,9%. Dentro de las cuatro semanas posteriores a la ATC índice, se prescribieron estatinas en el 90,1% de los pacientes. Aproximadamente la mitad de los procedimientos se realizó por indicación electiva, mientras que la otra mitad correspondió a presentaciones con síndrome coronario agudo (SCA). Los eventos clínicos ocurrieron en un 3,1%: muerte por cualquier causa en un 1,8%, infarto de miocardio en un 1,1% y paro cardiorrespiratorio en un 0,2%.
La no adherencia fue poco frecuente al inicio (1,18% a los 90 días), pero aumentó con el tiempo (4,70% a los 1.095 días).
La ocurrencia del desenlace primario —una combinación de muerte por cualquier causa, infarto de miocardio o paro cardiorrespiratorio— fue significativamente mayor entre los pacientes no adherentes, con un riesgo más de dos veces superior (HR: 2,50; IC 95%: 1,92–3,26; p < 0,001).
Esta asociación se mantuvo constante a lo largo del seguimiento, sin evidencia de variación significativa según el momento de la no adherencia.
¿Qué nos deja este estudio?
El estudio demuestra de manera contundente que la no adherencia a cualquier terapia antiplaquetaria después de una ATC con implante de SLF conlleva un riesgo sustancial y sostenido de eventos cardíacos críticos, duplicando la probabilidad de desenlaces graves independientemente del momento en que ocurra la interrupción del tratamiento.
Estos hallazgos subrayan la importancia de mantener estrategias consistentes de seguimiento, educación y apoyo a la adherencia, tanto por parte de los equipos de salud como de los sistemas de atención.
Asegurar el cumplimiento prolongado con la terapia antiplaquetaria debe considerarse una prioridad en la atención post-ATC.