La alimentación moderna no solo impacta nuestra salud, sino también la del planeta. Se estima que el sistema alimentario global genera cerca del 30% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), siendo la carne roja y los productos lácteos los principales responsables. Al mismo tiempo, su consumo excesivo se asocia con un mayor riesgo de enfermedades crónicas y mortalidad.
Frente a esto, la Dieta Planetaria de la Salud (PHD, por sus siglas en inglés), propuesta por la Comisión EAT-Lancet, combina beneficios para la salud y la sostenibilidad ambiental. Su objetivo es reducir el impacto ambiental de la dieta, aumentando la proporción de alimentos vegetales, y al mismo tiempo prevenir enfermedades crónicas.
¿Qué es la Dieta Planetaria de la Salud?
La PHD propone un patrón alimentario equilibrado y sostenible:
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Vegetales y frutas: abundantes y variados, incluyendo legumbres y frutos secos.
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Cereales integrales: arroz integral, avena, quinoa, trigo integral.
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Proteínas vegetales: legumbres, tofu, tempeh, frutos secos y semillas.
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Proteínas animales limitadas: principalmente pescado y aves; carne roja y procesada en pequeñas cantidades.
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Lácteos: moderados, preferentemente bajos en grasa.
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Grasas saludables: aceite de oliva, aguacate, frutos secos; limitar grasas saturadas.
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Azúcares y ultraprocesados: consumo mínimo.
Diversos estudios respaldan sus beneficios, aunque algunos resultados son contradictorios, especialmente respecto a mortalidad por cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Para clarificar estas relaciones, investigadores analizaron datos de dos grandes cohortes prospectivas—US NHANES y UK Biobank—y realizaron un meta-análisis que incluyó más de 3 millones de participantes de estudios previos.
Población y características
En NHANES, se analizaron 42.947 participantes (48% hombres, mediana de edad 47 años). En UK Biobank, 125.372 participantes (44% hombres, mediana de edad 57 años).
En ambas cohortes, quienes seguían más la PHD tendían a ser mujeres, mayores, con menor índice de masa corporal, mayor nivel educativo, menor tabaquismo y mayor ingesta de energía y macronutrientes. Esto refleja que la adherencia a esta dieta suele asociarse con otros hábitos de vida saludables.
Impacto ambiental de la dieta
El análisis mostró que los principales responsables de emisiones de gases de efecto invernadero eran la carne roja y los productos lácteos.
Otros alimentos, como cereales, frutas y grasas, aportaban menos al total. Esto indica que reemplazar parte de los alimentos de origen animal por opciones vegetales puede generar beneficios ambientales importantes.
Adherencia a la PHD y mortalidad
Durante los seguimientos, en NHANES se registraron 6.795 muertes y en UK Biobank 6.853 muertes.
- En NHANES, los participantes con mayor adherencia a la PHD tuvieron una reducción del 23% en mortalidad total, del 19% en mortalidad por enfermedad cardíaca y del 19% en mortalidad por otras causas.
- En UK Biobank, la alta adherencia se asoció con 16% menos mortalidad total, 16% menos mortalidad por cáncer y 61% menos mortalidad por enfermedades respiratorias.
Estos hallazgos muestran una relación lineal inversa: a mayor adherencia a la PHD, menor riesgo de muerte.
Metaanálisis global
Integrando datos de 37 estudios de cohorte con más de 3,2 millones de participantes, la PHD mostró beneficios consistentes:
- Mortalidad por cáncer: reducción del 11%
- Mortalidad por enfermedades cardiovasculares: reducción del 17%
- Mortalidad total: reducción del 21%
Además, la PHD se asoció con menor riesgo de enfermedades crónicas específicas:
- Cáncer colorrectal: -15%
- Cáncer de pulmón: -32%
- Enfermedades cardiovasculares: -17%
- Enfermedad coronaria: -17%
- Diabetes: -26%
- Accidente cerebrovascular: -16%
Los análisis de dosis-respuesta confirmaron que cuanto mayor la adherencia a la PHD, menor el riesgo de mortalidad y enfermedades crónicas, reforzando la consistencia de los resultados en distintas poblaciones y estudios.
¿Qué nos deja este estudio?
La Dieta Planetaria de la Salud ofrece un modelo de alimentación que protege tanto nuestra salud como la del planeta. Su adherencia se asocia con menor riesgo de mortalidad total, cáncer, enfermedades cardiovasculares, diabetes y accidentes cerebrovasculares. Además, priorizar alimentos vegetales y reducir el consumo de carne roja y lácteos contribuye a disminuir el impacto ambiental del sistema alimentario.
Los autores remarcan que la PHD representa un enfoque integral y respaldado por evidencia científica sólida, uniendo sostenibilidad y salud en un solo patrón dietético.