La fibrilación auricular (FA) es uno de las principales causas de accidente cerebrovascular (ACV) y cuando es identificada, el inicio de la anticoagulación oral (ACO) puede prevenir dos tercios de los ACV. Sin embargo, la FA frecuentemente es infradiagnosticada e infratratada y el ACV puede ser su primera manifestación. Se estima que 10%-20% de los ACV isquémicos se atribuyen a una FA previamente no diagnosticada.
El screening de FA en individuos asintomáticos puede aumentar el uso de anticoagulantes para prevenir el ACV.
Gladstone y colaboradores realizaron un estudio aleatorizado, multicéntrico de screening de FA mediante un electrocardiograma portátil en personas mayores de 75 años, hipertensos y sin FA conocida.
El grupo de control recibió atención estándar (seguimiento clínico de rutina más un control del pulso y auscultación cardíaca al inicio y a los 6 meses). El grupo de screening recibió un monitor electrocardiográfico continuo por 2 semanas para llevar al inicio y a los 3 meses, además de la atención estándar. Además, el grupo screening también recibió un monitor automático de presión arterial (PA) con un algoritmo de screening de FA para utilizar dos veces por día durante cada periodo de monitoreo ectrocardiográfico de 2 semanas.
El punto final primario fue la detección de FA dentro de los 6 meses post-randomización, tanto por el monitoreo electrocardiográfico o clínicamente en las visitas.
El punto final secundario fue el uso de anticoagulación oral a 6 meses.
Desde el 5 de abril de 2015 hasta el 26 de marzo de 2019, se incluyeron 856 participantes, 434 fueron asignados al grupo screening y 422 al grupo control.
La edad media de la población fue 80 años, con una mediana de puntaje CHA2-DS2-VASc de 4 puntos y 56.9% de mujeres,
En el análisis primario, se detectó FA en el 5.3% de los participantes en el grupo screening vs 0.5% en el grupo control (RR 11.2; IC 95% 2.7-47.1; p=0.001).
De aquellos con FA detectada, la mediana del tiempo total de FA fue de 6.3 h y la mediana de la duración del episodio de FA más largo fue de 5.7 horas.
Se inició anticoagulación en el 75% de los paciente con FA detectada.
A los 6 meses se había prescripto anticoagulación en el 4,1% de los pacientes del grupo screening vs 0.9% en el grupo control (RR 4,4; IC95%: 1-5.2.8; p=0.007)
El screening de FA realizado dos veces al día utilizando el monitor de TA doméstico tuvo una sensibilidad del 35% (IC 95%; 15.4%-59.2%), una especificidad del 81,% (IC 95%, 76,7%-84,8%), un valor predictivo positivo del 8,9% (IC 95%, 4,9%-15,5%) y un valor predictivo negativo del 95,9% (IC 95%, 94,5%-97,0%).
En el 1.2% de los participantes se produjeron reacciones cutáneas adversas que requirieron la interrupción prematura de la monitorización electrocardiográficas.
¿Qué podemos destacar?
Entre personas mayores con hipertensión, el screening de FA con un monitor electrocardiográgico portátil fue bien tolerado, y aumentó 10 veces la detección de la FA y gatilló el inicio del tratamiento anticoagulante en la mayoria de los casos.
Ahora se necesitan grandes ensayos con resultados clínicos contundentes para evaluar los posibles beneficios y perjuicios del screening de la FA.