Las complicaciones microvasculares de la diabetes representan una de las causas más importantes de mortalidad prematura, por lo que es clave identificar estrategias costo-efectivas para prevenir o retrasar su desarrollo.
Gang Liu y cols. realizaron un estudio de cohortes con el objetivo de evaluar prospectivamente la asociación entre la adherencia a un estilo de vida saludable antes y después del diagnóstico de diabetes tipo 2 (DBT2) y el riesgo de complicaciones microvasculares posteriores.
Los factores relacionados con la dieta y el estilo de vida antes y después del diagnóstico de diabetes fueron evaluados mediante cuestionarios validados.
Un estilo de vida saludable consistía en no fumar, tener un peso corporal saludable (IMC 18.5-25), realizar actividad física de intensidad moderada o vigorosa, consumir una dieta de alta calidad, y un consumo moderado de alcohol (5-15 g/d para las mujers y 5-30 g/d para los hombres). Los participantes recibían 1 punto si cumplían el criterio para cada factor de estilo de vida de bajo riesgo, y 0 puntos en caso contrario, con una puntuación final del estilo de vida de bajo riesgo que oscilaba entre 0 y 5 (la puntuación más alta correspondía a un estilo de vida más saludable).
Se incluyeron un total de 7.077 pacientes adultos DBT2, sin antecedentes de enfermedad cardiovascular o cáncer al momento del diagnóstico de diabetes, con una edad media de 61±8.8 años.
La proporción de participantes con 0, 1, 2, 3 o 4 o más factores de estilo de vida de bajo riesgo al momento del diagnóstico de la DBT2 era 8.5%, 33.5%, 35.4%, 16.9% y 5.7% respectivamente.
Durante el seguimiento, 2.878 pacientes desarrollaron complicaciones microvasculares.
Luego del ajuste multivariable, la adherencia a un estilo de vida saludable antes y después del diagnóstico de diabetes se asoció a un menor riesgo de desarrollar complicaciones microvasculares.
Comparados con los participantes sin factores de estilo de vida de bajo riesgo aquellos con 4 o más presentaron un riesgo significativamente menor de cualquier complicación microvascular (RR 0.73, IC95%:0.60-0.91), neuropatía diabética (RR 0.71, IC95%: 0.54-0.93), nefropatía diabética (RR 0.42, IC95%: 0.23-0.79) y pie diabético (RR 0.60, IC95%: 0.35-1)
Se observaron resultados similares para la adherencia a un estilo de vida saludable luego del diagnóstico de DBT2.
Además, una mayor mejora en los factores del estilo de vida desde el momento previo hasta luego del diagnóstico de diabetes, también se asoció significativamente con un menor riesgo de neuropatía o complicaciones microvasculares totales.
Cada incremento en el número de factores de estilo de vida de bajo riesgo se asoció con un 6% (RR 0.94, IC95%: 0.90-0.98) menos de riesgo de cualquier complicación microvascular y un 9% (RR 0.91, IC95%: 0.86-0.96) menos de riesgo de neuropatía diabética.
Estos hallazgos demuestran el papel clave de la modificación del estilo de vida en la prevención de complicaciones microvasculares en los pacientes con DBT2 y avalan las directrices de la Asociación Americana de Diabetes que recomiendan mejoras en el estilo de vida para estos pacientes.
Registrate en MedEcs y sumate a nuestra comunidad para estar al día con las novedades en Cardiología