La insuficiencia tricuspídea funcional (ITF) se considera aislada o idiopática en ausencia de enfermedad cardíaca/pulmonar izquierda. La IT aislada se asocia con mayor morbilidad y mortalidad, pero los mecanismos subyacentes a esta asociación o su posible dependencia de la disfunción diastólica del ventrículo izquierdo (DD) siguen siendo desconocidos.
La disnea de esfuerzo y la fatiga pueden atribuirse a la lesión valvular y al estado de bajo gasto posterior en pacientes con IT, pero estos síntomas también pueden ser causados por DD y la insuficiencia cardíaca con fracción de eyección preservada (ICFEp). Por lo tanto, los pacientes con ITF aparentemente aislada pueden tener DD oculta, que puede hacerse clínicamente evidente con el tiempo.
Es por ello que Jwan A. Naser y cols. llevaron a cabo un estudio de cohorte retrospectivo en la Clínica Mayo, con el propósito de evaluar la prevalencia de la DD utilizando ecocardiografía en reposo en las diferentes severidades de ITF, evaluar la incidencia de DD en el seguimiento en estos grupos y analizar la tasas de hospitalizaciones por insuficiencia cardíaca (IC) y mortalidad por todas las causas según el estado de IT y DD.
Para ello, consideraron los pacientes evaluados en la Clínica Mayo que tenían ecocardiogramas transtorácicos (ETT) desde 2010 a 2021 y se excluyeron los pacientes con fibrilación auricular de más de 1 mes previo al ETT, otras enfermedades cardiacas estructurales, dispositivos cardíacos, enfermedades del tejido conectivo y enfermedad tricuspídea primaria.
Se incluyeron 30.428 pacientes con una mediana de edad de 60 años, de los cuales el 50% eran mujeres. El 73% no tenían ITF, el 22% tenía ITF leve, el 4% ITF moderada y el 0.4% ITF severa.
Luego del emparejamiento por puntuación por propensión, se identificaron 375 pacientes de cada grupo de ITF.
La prevalencia de DD severa fue del 2% en el grupo sin ITF, 6% en el grupo con ITF leve, 9% en el grupo con ITF moderada y 13% con ITF severa.
La prevalencia de DD ≥moderada fue del 11% en el grupo sin ITF, 18% en el grupo con ITF leve, 28% en el grupo ITF moderada, 48% en el grupo con ITF severa.
La probabilidad de ICFEp aumentó con la severidad de la ITF (29.7%, 45.5%, 61.4% y 88.7%, respectivamente) al igual que la prevalencia de deformación auricular izquierda <24% (35%, 48%, 69% en IT leve, moderada y severa).
La incidencia de DD severa y ≥ moderada se desarrolló más frecuentemente con el aumento de la ITF (HR 8.45, IC95%: 2.60-27.50 y HR 2.82, IC95%: 1.40-5.69, respectivamente para ITF≥ moderada vs. no ITF) durante una mediana de 3 años de seguimiento.
Los hallazgos se confirmaron en pacientes sin enfermedad pulmonar o agrandamiento del ventrículo derecho.
Durante una mediana de 5.0 años, los pacientes con IT ≥ moderada y disfunción diastólica (DD) concomitante al inicio del estudio tuvieron las tasas más altas de hospitalizaciones por IC y mortalidad en comparación con los pacientes con una o ninguna de las condiciones, considerando tanto la DD severa como la ≥ moderada.
La asociación entre IT y resultados adversos se redujo significativamente en ausencia de DD.
Por otro lado, la presencia de DD ≥ moderada se asoció invariablemente con una mayor tasa de mortalidad, con la presencia concomitante de IT ≥ moderada confiriendo una mortalidad adicional; esta asociación se mantuvo a nivel multivariable.
¿Qué podemos recordar?
En una población sin FA crónica, valvulopatía izquierda significativa, disfunción sistólica del VI, enfermedad del tejido conectivo, dispositivo cardiaco o enfermedad pulmonar primaria, la IT secundaria se asoció de forma independiente con DD prevalente, probabilidad creciente de ICFEp subyacente y mayor riesgo de desarrollar DD clínicamente manifiesta.
La presencia concomitante de IT y DD conllevó una morbilidad y mortalidad significativas, mientras que la asociación entre IT y peores resultados se redujo drásticamente en ausencia de DD.
Los autores remarcan que estos datos indican la necesidad de tener en cuenta la cardiopatía izquierda y la ICFEp en pacientes con ITF de etiología incierta que presentan síntomas de esfuerzo, y sugieren que, incluso en pacientes con IT sin ICFEp manifiesta, las estrategias y terapias para prevenir la progresión a ICFEp clínica pueden ser de utilidad.