Diversos estudios observacionales y algunos ensayos clínicos aleatorizados de pequeño tamaño han sugerido beneficios clínicos con la introducción temprana de los inhibidores del cotransportador sodio-glucosa tipo 2 (iSGLT2) en el contexto de la insuficiencia cardíaca aguda (ICA). Sin embargo, la evidencia robusta sobre su eficacia y seguridad en este escenario clínico sigue siendo limitada y requiere un análisis más sistemático.
Con el objetivo de evaluar de manera más rigurosa los beneficios y riesgos del uso temprano de iSGLT2 en pacientes hospitalizados por ICA, se llevó a cabo una revisión sistemática y un metaanálisis. Para ello, se consultaron las bases de datos PUBMED, EMBASE y Cochrane desde su inicio hasta el 31 de mayo de 2024, seleccionando exclusivamente ensayos clínicos aleatorizados que investigaran el inicio precoz de iSGLT2 en esta población.
Los desenlaces de eficacia evaluados incluyeron la mortalidad por cualquier causa (considerado el criterio de valoración principal), las rehospitalizaciones por insuficiencia cardíaca, y un desenlace combinado de muerte cardiovascular o eventos relacionados con insuficiencia cardíaca, definidos como visitas urgentes o internaciones no programadas por insuficiencia cardíaca aguda. Por su parte, los desenlaces de seguridad analizados fueron la aparición de lesión renal aguda (AKI), cetoacidosis, infecciones del tracto urinario, hipotensión e hipoglucemia.
Se definió como “inicio precoz” aquel realizado antes del alta hospitalaria o dentro de los tres días posteriores a la internación. Además, se efectuó un análisis de sensibilidad considerando exclusivamente a los pacientes que comenzaron el tratamiento antes del alta.
En total, se incluyeron siete ensayos clínicos aleatorizados, que abarcaron a 2320 pacientes.
El uso temprano de iSGLT2 se asoció con una reducción significativa del riesgo de muerte por cualquier causa (OR 0,71; IC 95%: 0,55–0,92), así como de las rehospitalizaciones por insuficiencia cardíaca (OR 0,73; IC 95%: 0,57–0,94).
Estos beneficios se mantuvieron incluso tras ajustar por la duración del seguimiento, y fueron consistentes en el subgrupo de pacientes que iniciaron el tratamiento antes del alta.
En cuanto a los desenlaces de seguridad, no fue posible establecer conclusiones definitivas debido a la baja incidencia de eventos adversos y a la amplitud de los intervalos de confianza. Asimismo, el impacto diferencial en pacientes con o sin diabetes continúa siendo incierto, ya que pocos ensayos abordaron específicamente esta variable.
¿Qué podemos recordar?
La evidencia disponible respalda que la introducción temprana de iSGLT2 en pacientes con insuficiencia cardíaca aguda reduce la mortalidad por cualquier causa y las rehospitalizaciones. Su administración antes del alta hospitalaria es segura y efectiva, y debería considerarse como una estrategia terapéutica clave en la mayoría de los pacientes hospitalizados por ICA.