Las recomendaciones de las guías de práctica clínica para el tratamiento invasivo en pacientes de edad avanzada con síndromes coronarios agudos son limitadas, en gran parte debido a la subrepresentación de este grupo en los ensayos clínicos. La población de edad avanzada con infarto agudo de miocardio sin elevación del ST (IAMSEST) es heterogénea, y factores como la fragilidad y las comorbilidades juegan un rol clave en el manejo clínico.
Estudios previos han mostrado resultados mixtos en cuanto a la efectividad de una estrategia invasiva en comparación con un enfoque conservador en pacientes mayores. Aunque algunos estudios sugieren que la estrategia invasiva podría reducir los infartos de miocardio y la necesidad de revascularización urgente, la evidencia sigue siendo inconsistente y difícil de generalizar.
En este contexto se llevó a cabo el estudio SENIOR-RITA, que evaluó los beneficios de un enfoque invasivo rutinario, que contemplaba la realización de angiografía coronaria y revascularización, comparado con el mejor tratamiento médico disponible en una población representativa de pacientes mayores con IAMSEST, incluidos aquellos con fragilidad y comorbilidades.
Este fue un ensayo prospectivo, multicéntrico y aleatorizado, realizado en 48 centros del Reino Unido.
El punto final primario fue un compuesto de muerte por causas cardiovasculares o infarto de miocardio no fatal, evaluado mediante un análisis de tiempo hasta el evento.
Se incluyeron 1.518 pacientes, de los cuales 753 fueron asignados al grupo de estrategia invasiva y 765 al grupo de estrategia conservadora.
La edad media de los pacientes fue de 82 años, el 45% eran mujeres y el 32% eran frágiles. En la rama invasiva el 90.2% de los pacientes fue sometido a una cinecoronariografía (CCG), por vía radial en el 89.3% de los casos.
La mediana de tiempo desde la admisión hospitalaria hasta la CCG fue de 5 días, y desde la aleatorización a la CCG, de 3 días.
El 49.9% de los pacientes del grupo invasivo fue revascularizado, con angioplastia en el 46.6% de los casos, ATC a múltiples vasos en el 29.9%, ATC con balón en el 4.9%, y cirugía de revascularización miocárdica.
No se observaron diferencias significativas en el punto final primario entre el grupo de estrategia invasiva y el grupo de estrategia conservadora (HR 0.94, IC95%: 0.77-1.14, p=0.53) durante un seguimiento mediano de 4.1 años.
En cuanto a los componentes individuales del punto final primario, la mortalidad cardiovascular fue similar en ambos grupos (HR 15.8% vs. 14.2%, HR 1.11, IC95%: 0.86-1.44), aunque el infarto no fatal ocurrió menos frecuentemente en los pacientes que recibieron una estrategia invasiva (11.7% vs. 15%, HR 0.75, IC95%: 0.57-0.99).
Las complicaciones relacionadas con el procedimientos fueron poco frecuentes y ocurrieron en menos del 1% de los pacientes.
Mensaje Final
En adultos mayores con IAMSEST, una estrategia invasiva no resultó en una reducción significativa del riesgo de muerte cardiovascular o infarto de miocardio no fatal en comparación con una estrategia conservadora durante un seguimiento mediano de 4.1 años.
Referencia: Invasive Treatment Strategy for Older Patients with Myocardial Infarction