El síndrome de Takotsubo (ST) es una condición poco frecuente, responsable del 0,02% de las hospitalizaciones en EE. UU., con predominio en mujeres posmenopáusicas. Se caracteriza por una disfunción ventricular transitoria y una activación excesiva del sistema simpático desencadenada por estrés emocional o físico, aunque su mecanismo exacto aún no se ha esclarecido.
El tratamiento del ST basa en soporte cardíaco, pero no existe un consenso sobre la terapia óptima tras el alta hospitalaria. A pesar de la ausencia de ensayos clínicos aleatorizados, los inhibidores del sistema renina-angiotensina parecen estar asociados con una reduccion de la mortalidad. Sin embargo, el uso de betabloqueantes (BB) sigue siendo un tema de debate. Aunque su acción sobre las catecolaminas sugiere un posible beneficio, los estudios observacionales han mostrado resultados contradictorios.
Sergio Raposeiras-Roubin y cols. analizaron el impacto del tratamiento con BB al alta en el pronóstico a largo plazo en una de las cohortes más grandes de pacientes con ST hasta la fecha.
Se incluyeron 2.853 pacientes dados de alta con un diagnóstico confirmado de ST, inscritos en el registro internacional multicéntrico GEIST (The GErman Italian Spanish Takotsubo Registry). Para minimizar los factores de confusión, se realizó un análisis de emparejamiento por puntuación de propensión, conformando dos grupos de 697 pacientes, según la administración o no de BB al alta hospitalaria.
Durante un seguimiento medio de 2,6 años, el 17,0% de los pacientes fallecieron y el 3,4% presentaron recurrencia de ST. Los pacientes que no recibieron BB presentaban con mayor frecuencia comorbilidades como antecedentes de cáncer o EPOC/asma.
El tratamiento con BB al alta (n = 2.125; 74,5%) se asoció con una menor tasa de mortalidad (6,0 vs. 8,1 por 100 pacientes/año) en comparación con los que no los recibieron.
Tras el emparejamiento por puntuación de propensión, la mortalidad fue significativamente menor en el grupo tratado con BB (HR: 0,71; IC 95%: 0,55-0,90; p = 0,006), siendo esta diferencia más pronunciada durante el primer año.
No se encontraron variaciones significativas en los diferentes subgrupos analizados. Además, el uso de BB no se asoció con una menor recurrencia de ST durante el seguimiento (HR: 0,74; IC 95%: 0,61-1,89), ni con una mejor recuperación de la fracción de eyección del ventrículo izquierdo.
¿Qué podemos recordar?
En pacientes con ST que sobrevivieron a la hospitalización, el uso de BB se asoció con una mayor supervivencia a largo plazo, aunque no con una reducción en la recurrencia del síndrome. Estos hallazgos refuerzan la necesidad de ensayos clínicos que confirmen la relación causal entre la terapia con BB y la reducción de la mortalidad en esta población.